Enseñar aprendiendo

Los miro y ahora, veo.

Los miro y me detengo,

paro el reloj y atrapo el tiempo, 

para poder ser consciente de él

y de la realidad que existe

dentro de mi realidad inventada.

 

 

Los miro y ahora veo,

y todo es distinto a través de su mirada.

 

 

Ahí, donde todo llega al fin al inicio

siento revelárseme otro mundo,

porque todo cuanto me rodea 

me acoge sin juicios.

 

 

Los miro y por fin entiendo,

que he dedicado demasiado esfuerzo

en esos tienes que crecer,

en aquellos ya no tienes edad para eso,

puede que en cambiar lo que ya nace completo.

 

 

Los miro y así me veo,

y toda yo soy distinta a través de su mirada.

 

 

Aquí, donde el inicio se convierte en el fin

el ser se revela humano,

porque todo empieza y todo acaba

entre sus sinceras palabras calladas.

 

 

Los miro y me dejo arrastrar por la marea

que terca, curiosa, insaciable, 

me lleva donde el cinismo deja sitio a la sorpresa

y la naturaleza mueve montañas.

 

 

Los miro y ahora, veo.